Conjunciones
Una conjunción es una palabra que une dos proposiciones. Hay dos tipos: coordinantes y subordinantes.
Conjunciones coordinantes
Una conjunción coordinante une dos componentes del mismo tipo, produciendo un componente más largo del mismo tipo. Por ejemplo, dos frases nominales unidas por e forman una frase nominal más larga. Hay cuatro conjunciones coordinantes:
- e – «y» (ambos componentes son igualmente válidos)
- o – «o» (uno de los componentes es válido, eventualmente el otro también)
- no – «no», «y no», «pero no» (el primer componente es válido, el segundo no)
- ma – «pero» (ambos componentes son igualmente válidos, pero contrastan entre sí)
Ejemplos:
- La om e la fem vade a la casa. – El hombre y la mujer van a la casa.
- Tu es multe vea e saja. – Eres muy viejo y sabio. (Probablemente muy sabio, de lo contrario la frase sería tu es saja e multe vea)
- El ia labora ante e pos sua vacanse. – Ella trabajó antes y después de sus vacaciones.
- Sua aniversario es en marto o april. – Su cumpleaños es en marzo o abril.
- Tu desira cafe o te? – ¿Querés café o té?
- On pote visita la museo a lundi o jovedi. – Se puede visitar el museo el lunes o el jueves (o ambos).
- On ia eleje tu, no me. – Ellos te eligieron a ti, no a mí.
- Me ia conta no sola la oveas ma ance la capras. – Conté no solo las ovejas, sino también las cabras.
Con las listas de más de dos artículos, la conjunción normalmente se sustituye por una coma, excepto entre las dos últimas. Una coma se puede colocar a menudo antes de la conjunción, como en el ejemplo siguiente:
- Nos va viaja tra Italia, Suiz, Osteraic, e Deutxland. – Vamos a viajar por Italia, Suiza, Austria y Alemania.
Se pueden duplicar e, o, y no para dar énfasis, colocando la conjunción adicional delante del primer elemento. La doble o descarta la posibilidad de que ambos componentes sean válidos:
- e … e – tanto… como
- o… o – o bien… o
- no… no – ni… ni
Ejemplos:
- E Luis e Maria vade a scola. – Tanto Luis como María van a la escuela.
- O tu o me gania, ma no ambos. – O bien ganás vos o bien gano yo, pero no ambos.
- Me ave no la tempo no la desira per leje plu. – No tengo el tiempo ni el deseo de leer más.
E, o y ma pueden también unir dos enunciados o frases:
- Me ia vade a la biblioteca, e tu ia visita la museo. – Yo he ido a la biblioteca y tú has visitado el museo.
- O nos solve esta problem, o la mundo va fini. – O resolvemos este problema, o se acabará el mundo.
- Ma acel es difisil. – Pero eso es difícil.
El adverbio donce también se utiliza de esta manera, para decir e donce:
- Me pensa, donce me esiste. – Pienso, luego existo.
- Nos no ave un mapa, donce nos es perdeda. – No tenemos un mapa, por lo tanto estamos perdidos.
Conjunciones subordinantes
Una conjunción subordinante une una proposición a la oración, indicando su función en la frase.
Hay tres tipos: pronombres relativos, adverbios interrogativos y conjunciones especiales.
Pronombres relativos
Los pronombres interrogativos cual y ci pueden también actuar como conjunciones introduciendo los subordinantes relativos:
- La om ci ia abita asi ia vade a New York. – El hombre que vivía acá se fue a Nueva York.
- La poma cual ia cade de mea saco es aora noncomable. – La manzana que cayó de mi bolsa ahora es incomestible.
- La fem de ci nos parla labora a mea ofisia. – La mujer de la que hablamos trabaja en mi oficina.
- Tua libro, en cual me ia scrive sua nom, es sur la table. – Tu libro, en el cual he escrito su nombre, está sobre la mesa.
Por lo general, se refieren a un sustantivo precedente. A veces, se omite ese sustantivo. En tales casos, se puede agregar un pronombre para aclarar el significado:
- Esta es lo cual parteni a tu. – Esto es lo que te pertenece.
- La auto blu es lo en cual nos vole viaja. – El auto azul es en el que queremos viajar.
- Acel es el ci me ia vide. – Ese es el que vi.
- Tu es el a ci me ia parla ier. – Usted es a quien yo le hablé ayer.
- Ci osa, gania. – El que arriesga, gana.
El uso de cual y ci en preguntas indirectas es muy similar.
Adverbios interrogativos
Los adverbios interrogativos —do, cuando, cuanto, como, y perce— pueden servir como conjunciones subordinantes introduciendo oraciones circunstanciales subordinadas:
- Nos parla como nos pensa. – Hablamos como pensamos.
- Me dormi cuando me pote. – Duermo cuando puedo.
- Me va esplica cuanto me comprende. – Explicaré todo lo que comprendo.
- Nos abita do la du rios encontra. – Vivimos donde los dos ríos se encuentran.
- Me ia fini la taxe en cuando tu ia parla a me. – He terminado la tarea mientras me estabas hablando.
- Nos va core a do la vias encontra. – Vamos a correr a donde los caminos se encuentran.
También se puede utilizar después de un nombre, como conjunciones que introducen un enunciado subordinado de relativo:
- Me labora en Paris, do me abita. – Trabajo en París, en donde vivo.
- El va visita en julio, cuando la clima es bon. – Ella estará de visita en julio, cuando el clima es bueno.
- Acel es la razona perce Juan ia parti. – Esa es la razón por la que Juan se ha ido.
Y también se utilizan en preguntas indirectas (un tipo de subordinada circunstancial).
Conjunciones especiales
Las conjunciones subordinantes especiales ce y esce introducen las subordinadas nominales. Ce introduce una información adicional, y esce introduce una pregunta indirecta acerca de la veracidad del enunciado:
- Me pensa ce tu nesesa un vacanse. – Creo que necesitas unas vacaciones.
- Me no sabe esce el va veni. – No sé si va a venir.
Pueden ser utilizados después de ciertos nombres, adjetivos y preposiciones para completar el significado:
- La idea ce la sol orbita la tera es un era. – La idea de que el Sol orbita La Tierra es un error.
- Nos es surprendeda ce vos no ia cexa. – Estamos sorprendidos de que no os quejaseis.
- Me es felis ce tu ia susede. – Estoy contento de que tuvieses éxito.
- Los no ia es serta esce la tren ia parti ja. – No estaban seguros de si el tren ya había partido.
- La gato ia entra a la sala sin ce algun vide el. – El gato entró en la habitación sin que nadie lo viera.
Ce también puede ser usado para introducir una frase que expresa un resultado:
- El ia es tan fatigada ce el no ia pote pensa. – Él estaba tan fatigado que no podía pensar.
- El ia es tan fame ce el ia pote oia la ronca de sua stomaco. – Ella tenía tanta hambre que podía escuchar rugir su estómago.
Los subordinantes especiales afin, car, si y ca introducen frases adverbiales:
- Me va veni si tu clama. – Vendré si llamas.
- Me labora afin mea enfantes pote come. – Trabajo para que mis niños puedan comer.
- Lo es calda car la sol brilia. – Hace calor porque el Sol brilla.
- Esta es plu labora ca me ia espeta. – Esto es más trabajo del que esperaba.